El ayuno intermitente se puede integrar en cualquier rutina diaria, ya que no es una dieta, sino mucho más que eso. Al ayunar, le das un descanso a tu cuerpo y le haces un bien.
Hemos reunido algunos consejos para ayudarte a adaptarte a tu nuevo estilo de vida:
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Sigue el programa de coaching recomendado o elige un comienzo suave por ti mismo, por ejemplo con 14-10 o 16-8.
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Come alimentos ricos en nutrientes y bebe suficiente (al menos 2,5 litros al día).
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Mide tus perímetros corporales además del peso.
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Mantén bajo tu nivel de estrés y procura equilibrarte y relajarte.
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Ten paciencia y no te compares con los demás. Cada cuerpo es diferente.